Llamado el santo protector de lo imposible, es uno de los 12 apóstoles, contemplado en el evangelio de Mateo y Marcos como “Tadeo” aunque en el texto escrito por San Lucas, se le relaciona con el de “Judas de Santiago”, en todo caso, es conocido como “Hermano de Jesús”. Obviamente, todos los apóstoles de Jesús, eran llamados por el “Hermanos”. Así que no se trata de ningún otro hijo de María Santísima como algunos protestantes han dicho.
Para causas desesperadas
San Judas Tadeo tiene la atribución de socorrer con sus oraciones y sus facultades, durante las causas desesperadas, consideradas potencialmente imposibles de resolver, su nombre deriva de una palabra hebrea que significa: “alabanzas sean dadas a Dios” y el segundo nombre de “Tadeo” significa Literalmente: Corazón tierno y valiente, en Arameo, una lengua extinta que se cree según los estudios, hablaban Jesús y sus discípulos, igual que muchos de los habitantes de Jerusalén de aquellos tiempos. Su fiesta se celebra el 28 de octubre.
La oración
A San Judas Tadeo se le reza esta oración, entre otras:
San Judas Tadeo Te acepto como mi patrón y protector. En ti pongo mi alma y mi cuerpo, todos mis intereses espirituales y temporales como también los de mi familia. Te encomiendo mi mente para que en todo proceda a la luz de la fe; mi corazón para que lo guardes puro y lleno de amor a Jesús y María; mi voluntad para que, como la tuya, esté siempre unida a la voluntad de Dios. Te pido con fervor que me ayudes a dominar mis malas inclinaciones y tentaciones evitando todas las ocasiones de pecado. Consígueme la gracia de no ofender a Dios jamás, de cumplir fielmente con todas las obligaciones de mi estado de vida y practicar las virtudes necesarias para salvarme. Ora a Dios por mi Santo Patrono y auxilio mío, para que, con tu ejemplo como inspiración y tu bondadosa asistencia e intercesión, lleve una vida santa, llegue a una muerte dichosa y pueda ver la gloria del Cielo amando y dando gracias a Dios por todos los siglos. Amén.